CAJAMARCA, UNA FISTULA QUE RECIEN REVIENTA

Comenzaré a dibujar el presente artículo sin estadísticas y sin marcos normativos, sino con medidas probabilísticas de variables cualitativas que ocurrieron, me olvidaré por un momento de las contradicciones de los ministerios, en no ponerse de acuerdo en lo de CONGA, y eligieron el camino fácil, renunciar al cargo (viceministro) haciendo caso omiso a los reclamos de los Cajamarquinos, se olvidaron de la aprobación de Humala y se empezaron a vivir otros 100 días diferentes, días perdidos de promesas incumplidas, apareció la desestabilización política, los desequilibrios económicos en el mundo también se sentirán en Perú, se ausentarán las inversiones privadas, y los que más perderán son los inversionistas y el Estado, Cajamarca también lo sentirá, pero menos, porque en tantos años de minería la pobreza sigue pintando los rostros de los Cajamarquinos, para muestra un botón (Hualgayoc, explotada desde 1774, ellos siguen teniendo la vaca otros toman la leche), no tienen que compartir, solo alforjas llenas de miseria, nunca llegó el desarrollado por allí, por años le obsequió mucho al Perú y recién lo han empistado su carretera al ochenta por ciento, quienes llevaron las arcas de oro y plata, las transnacionales, los corruptos, el Estado que no hizo nada por los herederos de los productos no tradicionales -con los recursos de la Minería se ejecutaron muchas obras para el Perú, pero el Gobierno no ha hecho nada por paliar la pobreza de Cajamarca; entonces, quién ha estado bebiendo la leche por años.

Lamento que las cosas se hayan dado de esta forma, pero no por culpa de los Cajamarquinos, sino de las transnacionales y del Estado que no hicieron nada en fortalecer y potencializar algunos sectores económicos – productivos y mejorar los niveles de ingresos, hasta que la pueblo se cansó de esperar, y la llaga reventó, y seguirá así, hasta que el Estado se preocupe en paralizar la miseria, en desnutrición no hemos mejorado, en pobreza somos más pobres que antes que inicie la minería, en educación y salud indicadores anémicos, ni que hablar del IDH – Índice de Desarrollo humano, es el más bajo de todas las regiones.

Lo que ha pasado con la reciente protesta que continua- son pasivos arrastrados por años, es el resentimiento de los Cajamarquinos, y el engaña muchachos, minería = desarrollo, son los costes sociales y la disminución de la calidad de vida que perjudica a la población en su conjunto, mientras unos cuantos se benefician el descontento continúan reinando; la minería ha parido conflictos sociales, contaminación ambiental, destrucción de los recursos naturales, contaminación del agua, prostitución, delincuencia, alcoholismo, etc. Los productores no se han beneficiado, sus vacas, sus chacras no hay incrementado su producción, continúan de mal en peor, si es que los agentes cercanos a ellos dicen que les brindan asesoría técnica-productiva, ello no han llegado a la mayoría, solo a sus vecinos.

Es fácil lanzar “hipótesis técnicas” sin que hayan visitado el costado sangrante de Cajamarca, allí se palpa la pobreza con el corazón y no con la mano, es fácil hacer una crítica o un comentario, que por unos cuantos intransigentes terroristas o grupos de radicales se esté deteniendo las inversiones –claro, para el hermano peruano que no se empapa de la sangre contaminada de Cajamarca es fácil aceptar, como él no vive allí; pero gracias a la minería tiene su estadio, calles, parques, plataformas, veredas; su ciudad luce con el mejor traje a costas del dolor ajeno, a costas del alto coste social, la alta desigualdad y discriminación que acarrea este sector.

En el presente análisis cogeré algunas variables cualitativas y sopesaré en la balanza del tiempo -no quiero profundizar sobre el tema, que ya mucho se ha hablado, lo mediré de dos formas, una positiva y otra negativa, primeramente, abordaré la positiva, aunque la negativa es difícil de cuantificarlo: minería = +canon, +divisas, +impuesto a la renta, +crecimiento económico, ello reflejado en más empleo, inversiones y proyectos, etc., todo ello genera un efecto multiplicador en la economía; por el lado opuesto: minería = contaminación ambiental, deterioro de la salud, conflictos sociales, corrupción, pérdida de identidad cultura, deterioro de la flora y la fauna, contaminación del agua, prostitución, delincuencia, drogadicción, deterioro de la calidad de vida- reflejado en mayores índices de pobreza, no quiero sumar más variables a esta canasta social y/o familiar que sería innumerables. Al análisis se aúna la sostenibilidad, qué estamos heredando a nuestro hijos y nietos, más pobreza, Cajamarca quedará abandonada como Cerro de Pasco, y de qué vivirán tus y mis hijos, si todos los recursos ya lo saquearon, y lo contaminaron; pero como los peruanos tienen un satisfacción cortoplacista, no les interesa el futuro, tratan en lo posible de vivir el presente, no planifican y cuando llega el futuro que es muy cercano nos encuentra vacíos, de nuevo a vivir el momento, se le acabo la vida y no hizo nada, encima no se dio cuenta que ha vivido; dejemos de pensar como agentes cortoplacista, tampoco digamos -tenemos que postergar el futuro, o dejemos de pensar en el futuro, que nuestra oportunidad es hoy y explotaremos a toda costa (CONGA VA). Amigos lectores, saquen sus conclusiones y analicen las externalidades tanto positivas y negativas que factura el sector, y decidan qué es lo que nos conviene.

No soy antiminero, ni estoy en contra de las inversiones- sino que las cosas tienen que hacerse de otra forma, basta ya de equivocaciones y errores, se tiene que aprender de ellos, pero no se tiene que volver a repetirse, el pueblo ha despertado, está cansado de mentiras y engaños, los técnicos hablan de desarrollo cuando ni siquiera saben el significado, o si es que lo saben en la práctica son cero a la izquierda; los 20 años de minería hablan por sí solo para Cajamarca.

Señor Presidente Humala, no se trata de declarar a Cajamarca en estado de emergencia, sino de ver, por qué su disconformidad de la población con la minería, si es que existe protestas es porque algo no está caminando bien, se trata de hacer llegar el Estado a los rincones Cajamarquinos a donde nunca ha llegado y son las personas más perjudicadas por el monstro minero, se trata de analizar concienzudamente que cuando revienta la llaga y arrastra pus, es porque han existido causas previas. Cajamarca sigue pobre, gracias a los “irresponsables” que se preocupan de llenar sus bolsillos y saquean nuestros recursos a toda costa; por ello necesitamos inversión responsable, que respete los estándares ambientales, sociales, económicos y laborales, es la única forma de aceptar la minería en el país.