martes, 5 de abril de 2011

LA ARTESANIA CAJAMARQUINA Y SU ARTICULACION AL MERCADO

La artesanía es una actividad movida mayormente con energía humana y ha sido desarrollada con mayor significancia desde la cultura incaica; es utilizada como actividad secundaria, aunque actualmente se ha visto casos que algunas familias lo han convertido en actividad primaria. Antiguamente, el sector artesanal textil en Cajamarca no estaba muy desarrollado, debido al poco interés que le brindaban las instituciones públicas y privadas, ello se reflejaba en la baja calidad, escasa variedad en diseños, mal uso de los tintes y a la tecnología artesanal con la que producían (procesos no estandarizados); a ello se aúna el escaso capital humano y la débil asociatividad, y articulación al mercado. Ello hacía que el producto no sea aceptado por el mercado y mucho menos por turistas que arriban a la ciudad y que son muy exigentes en temas de calidad. Además, las personas dedicadas a este arte vendían sus productos individualmente a intermediarios, sin poder de negociación; las ventas eran paupérrimas y solo se ofertaba a nivel local o muchas veces los artesanos realizaban trueques; en otras ocasiones lo comercializaban a los grandes acopiadores de la provincia o de la región; debido a que las instituciones no promocionaban su cultura o no realizaban ferias, ni ruedas de negocio. Cabe mencionar que la aparición de otros bienes sustitutos al mercado textil por el proceso de globalización desplazaba a los textiles artesanales de Cajamarca, los cuales eran importados a precios más favorables y con estándares de calidad favorables para el mercado. 

A raíz de ello surgieron algunas instituciones como: ALAC, IDESI Cajamarca, CAPLAB; Gobierno Regional, Gobiernos Locales, entre otras; interesados en fortalecer el sector, e implementaron una serie de proyectos destinados al fortalecimiento de las capacidades artesanales y de emprendedurismo, lo que ha permitido mejorar los procesos productivos, organizaciones y de comercialización, ello se puede notar en la calidad de productos y diseños con los que se está confeccionando; es decir, actualmente existe algunas asociaciones o Redes de artesanos que cuentan con marcas reconocidas en otras regiones del país, se le añadido un valor agregado a sus productos y se han estandarizaron precios, gracias a la continua capacitación de los artesanos. Por mencionar el proyecto “Desarrollo de Capacidades Emprendedoras de Artesanos Textiles del Corredor Turístico Artesanal Porcón, para su Articulación al Mercado (2008-2009)” logró el siguiente impacto: 78 beneficiarios directos, los beneficiarios indirectos se calcula que fue de 4 personas por cada familia, los ingresos se incrementaron en 20% en promedio en toda la Red. Además, se logró que se conformen dos asociaciones más de 15 personas cada una (Yerba Buena-Km.20 y Inka Maqui-Km.22), que se incorporaron después a la Red, haciendo un total de 9 asociaciones. 

Además, el proyecto generó 5 puesto de trabajo permanentes, durante el horizonte del proyecto, que se encargaban de la parte administrativa. Los volúmenes de venta se incrementaron en un 25%. El producto que tiene una mayor demanda son los bolsos tipo chasqui, con ventas mayores en un 50% más que los otros productos. Finalmente, con los proyectos implementados en la región Cajamarca en temas de artesanía, se ha logrado una articulación comercial con enfoque de sostenibilidad, (La Red de Artesanos dejó de lado a un eslabón muy importante en la Cadena de Valor, los intermediarios o acopiadores tradicionales), incrementando los volúmenes de venta, el nivel de ingresos y por ende la calidad de vida de la familias; a ello se suma el incremento de nuevos emprendedores al sector. Además, las instituciones públicas y privadas deben involucrar más actores que estén especializados e interesados en el tema que contribuyan con el desarrollo técnico - científico de la artesanía y que cada vez propongan nuevas tecnologías que permita a los productores artesanales innovar sus productos. Las capacitaciones y asistencia técnicas tienen que ser sostenidas, continuas e integrales de acuerdo al avance de la ciencia y la tecnología, para que cuando existan cambios bruscos en los gustos y preferencias de los consumidores, los artesanos se adecuen rápidamente a los cambios. Solo así el sector artesanal podrá ser competitivo y adaptase a las exigencias del consumidor.


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